Estados
Unidos advertía descontento en población civil y mandos militares
Unidos advertía descontento en población civil y mandos militares
P
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oco
a poco, el descontento iba acrecentándose no solamente en la población civil,
sino en los mandos armados dominicanos. Uno de los detonantes que precedió a la
“Revolución de Abril de1965”
fue la posposición de manera indefinida de las elecciones que se celebrarían
ese año, de parte del presidente doctor Donald Reid Cabral, así como la
cancelación de un grupo de oficiales del Ejército, los que estarían
involucrados en el complot para retornar al profesor Juan Bosch ala Presidencia. En
ese discurrir llega el mes de abril y los acontecimientos se precipitan.
a poco, el descontento iba acrecentándose no solamente en la población civil,
sino en los mandos armados dominicanos. Uno de los detonantes que precedió a la
“Revolución de Abril de
fue la posposición de manera indefinida de las elecciones que se celebrarían
ese año, de parte del presidente doctor Donald Reid Cabral, así como la
cancelación de un grupo de oficiales del Ejército, los que estarían
involucrados en el complot para retornar al profesor Juan Bosch a
ese discurrir llega el mes de abril y los acontecimientos se precipitan.
La versión está contenida en los
Documentos de Leavenworth, un análisis del profesor Lawrence Yates, dela Escuela de Combate, Comando
y Estado Mayor del Ejército de los Estados Unidos, en Texas.
Documentos de Leavenworth, un análisis del profesor Lawrence Yates, de
y Estado Mayor del Ejército de los Estados Unidos, en Texas.
Los preparativos del gobierno del
doctor Reid Cabral para celebrar las elecciones en septiembre de 1965 iban
supuestamente “viento en popa” con los auspicios del gobierno estadounidense
pero en la medida en que se daba cuenta de la extrema inseguridad de su
posición política, el presidente dominicano comenzó a insinuar acerca de una
posposición de la fecha de los comicios y a comentar que “ciertos individuos
desestabilizadores”, llamados Bosch y Balaguer, no se podrían tomar en cuenta
como candidatos.
doctor Reid Cabral para celebrar las elecciones en septiembre de 1965 iban
supuestamente “viento en popa” con los auspicios del gobierno estadounidense
pero en la medida en que se daba cuenta de la extrema inseguridad de su
posición política, el presidente dominicano comenzó a insinuar acerca de una
posposición de la fecha de los comicios y a comentar que “ciertos individuos
desestabilizadores”, llamados Bosch y Balaguer, no se podrían tomar en cuenta
como candidatos.
El caos en el orden político,
económico y social era patente. Esto, sumado a la retórica de Reid Cabral, en
lugar de aprovechar la división latente que había entre sus oponentes, unió a
sus enemigos cada vez más, mientras tanto, el elemento pro-Bosch entre los
conspiradores contra el Triunvirato esperaba con poca convicción que Estados
Unidos garantizara unas elecciones libres.
económico y social era patente. Esto, sumado a la retórica de Reid Cabral, en
lugar de aprovechar la división latente que había entre sus oponentes, unió a
sus enemigos cada vez más, mientras tanto, el elemento pro-Bosch entre los
conspiradores contra el Triunvirato esperaba con poca convicción que Estados
Unidos garantizara unas elecciones libres.
Fue esta situación de inseguridad y
tambaleo de Reid Cabral que llevó al grupo de la oposición a decidir que de no
presentar el gobierno norteamericano las garantías necesarias para efectuar los
comicios en la fecha prevista, el primero de junio, primer día de la campaña
electoral, tomaría acciones para derrocar al gobierno.
tambaleo de Reid Cabral que llevó al grupo de la oposición a decidir que de no
presentar el gobierno norteamericano las garantías necesarias para efectuar los
comicios en la fecha prevista, el primero de junio, primer día de la campaña
electoral, tomaría acciones para derrocar al gobierno.
Llega el mes de abril de 1965 y la Embajada de los Estados
Unidos todavía no había dicho si insistiría en las elecciones nacionales, ya
que los informes de los agentes dela Central Intelligence
Agency (CIA) no eran muy alentadores al respecto.
Unidos todavía no había dicho si insistiría en las elecciones nacionales, ya
que los informes de los agentes de
Agency (CIA) no eran muy alentadores al respecto.
Un candidato sin fuerzas
“Una encuesta de la CIA indicaba que, en unos
comicios libres, Reid Cabral recibiría no más de un 5 por ciento de los votos,
mientras que Balaguer posiblemente obtendría el 50 por ciento y Bosch un 25 por
ciento. Lo que se debería hacer en vista de esta inquietante noticia dividió a
las autoridades políticas dela
Embajada , algunos, incluyendo a Bennett, favorecieron
explorar alternativas no electorales que podrían mantener a Reid Cabral en el poder;
otros abogaron por facilitarle la retirada y buscar la base para llegar a un convenio
con Balaguer”, manifiesta el documento de Leaveworth.
comicios libres, Reid Cabral recibiría no más de un 5 por ciento de los votos,
mientras que Balaguer posiblemente obtendría el 50 por ciento y Bosch un 25 por
ciento. Lo que se debería hacer en vista de esta inquietante noticia dividió a
las autoridades políticas de
Embajada
explorar alternativas no electorales que podrían mantener a Reid Cabral en el poder;
otros abogaron por facilitarle la retirada y buscar la base para llegar a un convenio
con Balaguer”, manifiesta el documento de Leaveworth.
Pero el debate tendría que
dilucidarse y decidirse en Washington. Todos consideraron los riesgos
involucrados en tardar la decisión, y a medida que aumentaban los rumores de un
golpe de Estado, el embajador Bennett advirtió a Washington que “pequeñas
zorras, algunas de ellas rojas, estaban mordiendo las uvas”, en referencia a la
amenaza de los “comunistas” de hacerse con el poder.
dilucidarse y decidirse en Washington. Todos consideraron los riesgos
involucrados en tardar la decisión, y a medida que aumentaban los rumores de un
golpe de Estado, el embajador Bennett advirtió a Washington que “pequeñas
zorras, algunas de ellas rojas, estaban mordiendo las uvas”, en referencia a la
amenaza de los “comunistas” de hacerse con el poder.
Detonante de la Revolución : Despiden
oficiales
oficiales
Cuando parecía que el tiempo se
estaba acabando, Reid Cabral, el 22 de abril de 1965 despidió a 7 oficiales
jóvenes envueltos en el complot para regresar al depuesto presidente Bosch al
poder. Los funcionarios dela
Embajada creyeron en ese momento que tendrían tiempo suficiente
para maniobrar y deliberar antes de que Estados Unidos decidiera cómo manejar
la situación.
estaba acabando, Reid Cabral, el 22 de abril de 1965 despidió a 7 oficiales
jóvenes envueltos en el complot para regresar al depuesto presidente Bosch al
poder. Los funcionarios de
Embajada
para maniobrar y deliberar antes de que Estados Unidos decidiera cómo manejar
la situación.
Los miembros de la legación
diplomática se confiaron demasiado. Creyendo que con el despido de los 7
oficiales las cosas volverían a tomar su rumbo, al día siguiente, viernes 23 de
abril, el embajador Bennett salió rumbo a Georgia a visitar a su madre que se
encontraba en delicado estado de salud, para pasar después por Washington a
presentar el caso de República Dominicana y buscar ayuda gubernamental para
Reid Cabral.
diplomática se confiaron demasiado. Creyendo que con el despido de los 7
oficiales las cosas volverían a tomar su rumbo, al día siguiente, viernes 23 de
abril, el embajador Bennett salió rumbo a Georgia a visitar a su madre que se
encontraba en delicado estado de salud, para pasar después por Washington a
presentar el caso de República Dominicana y buscar ayuda gubernamental para
Reid Cabral.
A cargo de la Embajada quedó el jefe
auxiliar de la misión, William Connett, hijo, quien tenía solamente seis meses
en el cargo.
auxiliar de la misión, William Connett, hijo, quien tenía solamente seis meses
en el cargo.
“La misión militar norteamericana
acantonada en Santo Domingo también bajó la guardia, envió a doce de sus trece miembros
a una conferencia en Panamá. El director dela AID y el asesor de seguridad pública asignados a la Embajada estaban en
Washington, y el agregado naval, un teniente coronel dela Marina , se fue de fin de semana
al interior, a un viaje de cacería de patos con el general Antonio Imbert
Barreras, uno de los dos únicos sobrevivientes entre los ajusticiadores de
Trujillo. Imbert también era uno de los pocos generales que no estaba
activamente comprometido en alguna conspiración contra el gobierno, quizá porque
su rango era honorario y su relación con las fuerzas militares regulares era
tensa”, según dice el informe en la página 27.
acantonada en Santo Domingo también bajó la guardia, envió a doce de sus trece miembros
a una conferencia en Panamá. El director de
Washington, y el agregado naval, un teniente coronel de
al interior, a un viaje de cacería de patos con el general Antonio Imbert
Barreras, uno de los dos únicos sobrevivientes entre los ajusticiadores de
Trujillo. Imbert también era uno de los pocos generales que no estaba
activamente comprometido en alguna conspiración contra el gobierno, quizá porque
su rango era honorario y su relación con las fuerzas militares regulares era
tensa”, según dice el informe en la página 27.
Y continúa explicando que el hecho
de que el embajador, la mayoría de los asesores militares y otras autoridades
norteamericanas claves se encontraran fuera de Santo Domingo a inicios del
último fin de semana de abril “fue un vívido testimonio de la habilidad de los
conspiradores pro Bosch de retener un alto grado de reserva, incluso después de
la pérdida de siete de sus miembros y de la incapacidad de las autoridades
norteamericanas encargadas de reunir inteligencia, de penetrar los grupos de
oposición”.
de que el embajador, la mayoría de los asesores militares y otras autoridades
norteamericanas claves se encontraran fuera de Santo Domingo a inicios del
último fin de semana de abril “fue un vívido testimonio de la habilidad de los
conspiradores pro Bosch de retener un alto grado de reserva, incluso después de
la pérdida de siete de sus miembros y de la incapacidad de las autoridades
norteamericanas encargadas de reunir inteligencia, de penetrar los grupos de
oposición”.
Rápidamente se hizo claro que el
despido de los oficiales el 22 de abril, lejos de proporcionar al gobierno un
descanso político, eliminó el tiempo que le quedaba para solucionar la
creciente crisis política, pues, temerosos de que un retraso pudiera poner en
peligro el complot, los conspiradores adelantaron la fecha del golpe del 1º de
junio al 26 de abril, “también decidieron que cualquier movida de Reid Cabral
contra sus rangos antes del 26 ocasionaría una acción inmediata contra su
régimen. Fue una decisión previsora”.
despido de los oficiales el 22 de abril, lejos de proporcionar al gobierno un
descanso político, eliminó el tiempo que le quedaba para solucionar la
creciente crisis política, pues, temerosos de que un retraso pudiera poner en
peligro el complot, los conspiradores adelantaron la fecha del golpe del 1º de
junio al 26 de abril, “también decidieron que cualquier movida de Reid Cabral
contra sus rangos antes del 26 ocasionaría una acción inmediata contra su
régimen. Fue una decisión previsora”.
Inicia la Revolución : Apresan
jefe de Estado Mayor EN
jefe de Estado Mayor EN
El
sábado 24 de abril, día decisivo parala República Dominicana ,
el jefe de Estado Mayor del Ejército, general Marcos A. Rivera Cuesta, informó
al presidente Reid Cabral que había descubierto a cuatro oficiales más que
estaban en el complot contra el gobierno, y el ejecutivo, ajeno todavía a la
magnitud del sentimiento a favor de Bosch dentro de las fuerzas militares,
ordenó a Rivera Cuesta que los despidiera.
sábado 24 de abril, día decisivo para
el jefe de Estado Mayor del Ejército, general Marcos A. Rivera Cuesta, informó
al presidente Reid Cabral que había descubierto a cuatro oficiales más que
estaban en el complot contra el gobierno, y el ejecutivo, ajeno todavía a la
magnitud del sentimiento a favor de Bosch dentro de las fuerzas militares,
ordenó a Rivera Cuesta que los despidiera.
“Cuando el jefe de Estado Mayor
llegó al cuartel general del Ejército sin escolta armada –un movimiento que
Reid Cabral calificó posteriormente de estúpido–, fue arrestado por los
conspiradores. El golpe de Estado estaba en marcha dos días antes de lo
programado, por lo que la mayoría de los conspiradores fueron tomados por
sorpresa cuando se les llamó, y luego al regresar a sus puestos y ser informados
de los acontecimientos ocurridos en la mañana”.
llegó al cuartel general del Ejército sin escolta armada –un movimiento que
Reid Cabral calificó posteriormente de estúpido–, fue arrestado por los
conspiradores. El golpe de Estado estaba en marcha dos días antes de lo
programado, por lo que la mayoría de los conspiradores fueron tomados por
sorpresa cuando se les llamó, y luego al regresar a sus puestos y ser informados
de los acontecimientos ocurridos en la mañana”.
Un dato curioso en este primer día
de la insurrección, que se hace notar expresamente en los documentos de
Leavenworth es que hasta que las unidades comprometidas en el complot se
organizaron y otras pudieron ser persuadidas de unírseles, el coronel Hernando
Ramírez “no podía implementar su plan de operaciones militares contra el
gobierno porque como dijera un analista en esa oportunidad, el teléfono, mucho
más que la ametralladora, fue el arma que se usó el primer día de la revuelta
constitucionalista”.
de la insurrección, que se hace notar expresamente en los documentos de
Leavenworth es que hasta que las unidades comprometidas en el complot se
organizaron y otras pudieron ser persuadidas de unírseles, el coronel Hernando
Ramírez “no podía implementar su plan de operaciones militares contra el
gobierno porque como dijera un analista en esa oportunidad, el teléfono, mucho
más que la ametralladora, fue el arma que se usó el primer día de la revuelta
constitucionalista”.
Lo primero que se hizo fue notificar
a los oficiales y a los civiles comprometidos en la conspiración. Y ya en la
tarde del sábado, entre mil y mil 500 militares desafectos al Triunvirato, en
su mayoría procedentes de un batallón del Ejército en el Campamento 16 de
Agosto y la unidad de 250 hombres del Campamento de Artillería 6 –ambos
ubicados al noroeste de a ciudad—fueron los primeros que se unieron al esfuerzo
para derrocar a Reid Cabral, así como otro batallón del Campamento 27 de
Febrero; y en la tarde del 24, el Batallón Mella, en San Cristóbal, también
prometió su apoyo.
a los oficiales y a los civiles comprometidos en la conspiración. Y ya en la
tarde del sábado, entre mil y mil 500 militares desafectos al Triunvirato, en
su mayoría procedentes de un batallón del Ejército en el Campamento 16 de
Agosto y la unidad de 250 hombres del Campamento de Artillería 6 –ambos
ubicados al noroeste de a ciudad—fueron los primeros que se unieron al esfuerzo
para derrocar a Reid Cabral, así como otro batallón del Campamento 27 de
Febrero; y en la tarde del 24, el Batallón Mella, en San Cristóbal, también
prometió su apoyo.
“El PRD y otras organizaciones
civiles anti-Reid, incluyendo los comunistas, también estaban movilizando sus
recursos”. Otro dato curioso que llama la atención y que consigna el profesor
Yates, es que “por una casualidad, José Francisco Peña Gómez, uno de los jefes
civiles de la conspiración, recibió noticias de la revuelta mientras emitía una
transmisión radial. Rápidamente anunció que el gobierno había sido derrocado y
llamó a todos los simpatizantes a lanzarse a las calles; miles se volcaron a la
celebración”.
civiles anti-Reid, incluyendo los comunistas, también estaban movilizando sus
recursos”. Otro dato curioso que llama la atención y que consigna el profesor
Yates, es que “por una casualidad, José Francisco Peña Gómez, uno de los jefes
civiles de la conspiración, recibió noticias de la revuelta mientras emitía una
transmisión radial. Rápidamente anunció que el gobierno había sido derrocado y
llamó a todos los simpatizantes a lanzarse a las calles; miles se volcaron a la
celebración”.
“Tomada por sorpresa, la Policía no hizo ningún
esfuerzo por detener las demostraciones; esa falta de acción aumentó el sentimiento
general de que el informe de Peña Gómez era verídico, mas no era así. Reid
Cabral no había capitulado y estaba tratando frenéticamente de determinar lo
que estaba sucediendo. En la misma situación se encontraba el personal dela Embajada de los Estados
Unidos, que empezaba a recibir con frecuencia informes conflictivos de sus
contactos locales”, se puntualiza en los documentos de Leavenworth.
esfuerzo por detener las demostraciones; esa falta de acción aumentó el sentimiento
general de que el informe de Peña Gómez era verídico, mas no era así. Reid
Cabral no había capitulado y estaba tratando frenéticamente de determinar lo
que estaba sucediendo. En la misma situación se encontraba el personal de
Unidos, que empezaba a recibir con frecuencia informes conflictivos de sus
contactos locales”, se puntualiza en los documentos de Leavenworth.
El panorama político que se estaba
presentando era confuso, impreciso y alarmante, como para hacer que Connett
despachara un cable a Washington marcado “CRITICO UNO”, el que empezaba
diciendo: “Santo Domingo está lleno de rumores sobre un derrocamiento”.
presentando era confuso, impreciso y alarmante, como para hacer que Connett
despachara un cable a Washington marcado “CRITICO UNO”, el que empezaba
diciendo: “Santo Domingo está lleno de rumores sobre un derrocamiento”.
Cuando Connett envió el cable, la
unidad del CEFA agregada a la guardia del Palacio Nacional se estaba movilizando
hacia Santo Domingo, que había sido tomada por los conspiradores temprano en la
tarde. Las fuerzas militares que participaban en la revuelta todavía no habían
entrado a la ciudad, y la desarmada población no podía hacerle frente a los
tanques del CEFA.
unidad del CEFA agregada a la guardia del Palacio Nacional se estaba movilizando
hacia Santo Domingo, que había sido tomada por los conspiradores temprano en la
tarde. Las fuerzas militares que participaban en la revuelta todavía no habían
entrado a la ciudad, y la desarmada población no podía hacerle frente a los
tanques del CEFA.
Las fuerzas progubernamentales
recapturaron la estación de radio y procedieron a arrestar a varios
“agitadores”. Más tarde, Donald Reid Cabral transmitió un discurso a través de
la radio y la televisión, en el que aseguró al país que tenía control de la
situación, explicando de paso el origen de la revuelta militar y las medidas
que se estaban tomando para suprimirla, dando a los conspiradores un plazo
hasta las 6 de la mañana del día siguiente para rendirse, al tiempo que anunció
la implantación del toque de queda.
recapturaron la estación de radio y procedieron a arrestar a varios
“agitadores”. Más tarde, Donald Reid Cabral transmitió un discurso a través de
la radio y la televisión, en el que aseguró al país que tenía control de la
situación, explicando de paso el origen de la revuelta militar y las medidas
que se estaban tomando para suprimirla, dando a los conspiradores un plazo
hasta las 6 de la mañana del día siguiente para rendirse, al tiempo que anunció
la implantación del toque de queda.
El asesor Connett, “obedientemente
informó del discurso a Washington, pero no pudo dar información adicional sobre
la situación. Las autoridades dela
Embajada de los Estados Unidos no podían identificar a una
organización o a un grupo político como responsable del levantamiento, pero sí
señalaron la presencia de los jefes laboristas izquierdistas y de los fanáticos
de la clase izquierdista del PRD, entre los manifestantes”.
informó del discurso a Washington, pero no pudo dar información adicional sobre
la situación. Las autoridades de
Embajada
organización o a un grupo político como responsable del levantamiento, pero sí
señalaron la presencia de los jefes laboristas izquierdistas y de los fanáticos
de la clase izquierdista del PRD, entre los manifestantes”.
Los cables enviados al Departamento
de Estado desde el país advertían, sin embargo, “los comunistas parecían estar
envueltos en el levantamiento”, por lo que, durante el primer día de la crisis,
la Embajada
suscitó el tema ideológico, “que dominaría las deliberaciones de los formuladores
norteamericanos de políticas en los días venideros y la controversia pública
sobre la intervención norteamericana en los años subsiguientes”.
de Estado desde el país advertían, sin embargo, “los comunistas parecían estar
envueltos en el levantamiento”, por lo que, durante el primer día de la crisis,
suscitó el tema ideológico, “que dominaría las deliberaciones de los formuladores
norteamericanos de políticas en los días venideros y la controversia pública
sobre la intervención norteamericana en los años subsiguientes”.
Así las cosas, al atardecer del
sábado 24, los sucesos en Santo Domingo habían culminado con la aparición
pública de Reid Cabral, lo que dio la impresión de que el Triunvirato había
restablecido su autoridad y de que casi se había suprimido la revuelta; esta
impresión fue apoyada por los errados informes dela Embajada que daban cuenta
de que Wessin y Wessin y otros militares claves se estaban agrupando rápidamente
en apoyo de Reid Cabral.
sábado 24, los sucesos en Santo Domingo habían culminado con la aparición
pública de Reid Cabral, lo que dio la impresión de que el Triunvirato había
restablecido su autoridad y de que casi se había suprimido la revuelta; esta
impresión fue apoyada por los errados informes de
de que Wessin y Wessin y otros militares claves se estaban agrupando rápidamente
en apoyo de Reid Cabral.
El informe da cuenta de que “el
grado en que esta impresión estaba equivocada se hizo evidente el domingo,
cuando lo que había empezado como un intento de golpe de Estado acompañado de
demostraciones antigubernamentales, se tornó en una guerra civil en las calles
de la capital”.
grado en que esta impresión estaba equivocada se hizo evidente el domingo,
cuando lo que había empezado como un intento de golpe de Estado acompañado de
demostraciones antigubernamentales, se tornó en una guerra civil en las calles
de la capital”.
Los informes de la inteligencia que
llegaron ala Embajada
de los Estados Unidos en la mañana del domingo indicaban que casi dos tercios
del Ejército acantonado en Santo Domingo y sus alrededores se había sublevado y
estaba armando a los civiles simpatizantes y en la noche del 24-25 de abril
fuerzas rebeldes entraron a la capital, capturaron una estación de bomberos,
establecieron unas posiciones defensivas en sitios claves y continuaron armando
a los civiles.
llegaron a
de los Estados Unidos en la mañana del domingo indicaban que casi dos tercios
del Ejército acantonado en Santo Domingo y sus alrededores se había sublevado y
estaba armando a los civiles simpatizantes y en la noche del 24-25 de abril
fuerzas rebeldes entraron a la capital, capturaron una estación de bomberos,
establecieron unas posiciones defensivas en sitios claves y continuaron armando
a los civiles.
“Los extremistas izquierdistas ahora
parecían estar agrupándose, estableciendo puestos de mando, distribuyendo armas
reunidas en arsenales militares e incitando a la violencia. Voceros militares y
rebeldes del PRD demandaron el derrocamiento de Reid Cabral y el retorno al
gobierno constitucional, ocasionando con esta última demanda que se bautizara
su movimiento con el nombre de “Constitucionalistas”.
parecían estar agrupándose, estableciendo puestos de mando, distribuyendo armas
reunidas en arsenales militares e incitando a la violencia. Voceros militares y
rebeldes del PRD demandaron el derrocamiento de Reid Cabral y el retorno al
gobierno constitucional, ocasionando con esta última demanda que se bautizara
su movimiento con el nombre de “Constitucionalistas”.
Las fuerzas constitucionalistas retomaron la
estación de Radio Santo Domingo y avanzaron hastala Fortaleza Ozama ,
“uno de los principales arsenales en la ciudad”.
estación de Radio Santo Domingo y avanzaron hasta
“uno de los principales arsenales en la ciudad”.
Con relación al papel de la Policía Nacional , los
documentos de Leavenworth dicen textualmente: “La policía local, ahora superada
en armas por los rebeldes no hizo intento alguno por intervenir. Tal como Piero
Gleijeses –profesor norteamericano de política exterior–irónicamente observó,
el jefe dela Policía ,
general Hernán Despradel Brache, ansioso por no quedar alineado con el grupo
perdedor, cualquiera que éste fuese, descubrió con insospechada agilidad
mental…el concepto de una fuerza policíaca apolítica”.
documentos de Leavenworth dicen textualmente: “La policía local, ahora superada
en armas por los rebeldes no hizo intento alguno por intervenir. Tal como Piero
Gleijeses –profesor norteamericano de política exterior–irónicamente observó,
el jefe de
general Hernán Despradel Brache, ansioso por no quedar alineado con el grupo
perdedor, cualquiera que éste fuese, descubrió con insospechada agilidad
mental…el concepto de una fuerza policíaca apolítica”.
La “neutralidad” de la Policía , no obstante, no
garantizó su seguridad. “El recuerdo de sus tácticas represivas –apalearle un poco
el sentido común a la oposición– todavía estaba vivo. Así, los policías se
quitaron sus uniformes a medida que se extendía el rumor de que muchos de sus
compañeros habían sido ejecutados sumariamente por grupos insurrectos de
civiles armados, especialmente por jóvenes pendencieros que se llamaban a sí
mismos Los Tigres”, refiere el informe en cuestión.
garantizó su seguridad. “El recuerdo de sus tácticas represivas –apalearle un poco
el sentido común a la oposición– todavía estaba vivo. Así, los policías se
quitaron sus uniformes a medida que se extendía el rumor de que muchos de sus
compañeros habían sido ejecutados sumariamente por grupos insurrectos de
civiles armados, especialmente por jóvenes pendencieros que se llamaban a sí
mismos Los Tigres”, refiere el informe en cuestión.
Al ver Reid Cabral que los rebeldes
habían entrado a Santo Domingo, se dedicó a redoblar los esfuerzos que había
iniciado el sábado 24 en la tarde para asegurar el apoyo de altos jefes
militares. El jefe de Estado Mayor dela Marina de Guerra, comodoro Francisco Rivera
Caminero, prometió su apoyo al triunviro, al igual que el general Wessin, ambos
hablaron a Reid y a los agregados militares norteamericanos sobre la inminente
acción militar, “pero ninguno de los dos hizo hada por proteger al gobierno,
incluso después que en las primeras horas del domingo 25, Reid Cabral nombrara
a Wessin secretario de las Fuerzas Armadas”.
habían entrado a Santo Domingo, se dedicó a redoblar los esfuerzos que había
iniciado el sábado 24 en la tarde para asegurar el apoyo de altos jefes
militares. El jefe de Estado Mayor de
Caminero, prometió su apoyo al triunviro, al igual que el general Wessin, ambos
hablaron a Reid y a los agregados militares norteamericanos sobre la inminente
acción militar, “pero ninguno de los dos hizo hada por proteger al gobierno,
incluso después que en las primeras horas del domingo 25, Reid Cabral nombrara
a Wessin secretario de las Fuerzas Armadas”.
Le toca el turno a Wessin
y Wessin
y Wessin
Esta vez le tocó el turno a Wessin y
Wessin de devolver el desaire público que le había hecho Reid Cabral cuando se
refirió a la relación entre el Triunvirato y el CEFA, al adoptar un enfoque
cauteloso en el que “el oportunismo excedió al deber hacia un régimen
impopular”.
Wessin de devolver el desaire público que le había hecho Reid Cabral cuando se
refirió a la relación entre el Triunvirato y el CEFA, al adoptar un enfoque
cauteloso en el que “el oportunismo excedió al deber hacia un régimen
impopular”.
Contrario a los golpes anteriores en
los que había participado, en esta ocasión el todopoderoso jefe del CEFA, ya
secretario de Estado, se enfrentaba a unas Fuerzas Armadas de tamaño incierto;
sus tanques podrían ser capaces de someter a los rebeldes, pero no estaba
seguro, “y perder sus tanques significaba perder su poder”, dice Yates en el
documento.
los que había participado, en esta ocasión el todopoderoso jefe del CEFA, ya
secretario de Estado, se enfrentaba a unas Fuerzas Armadas de tamaño incierto;
sus tanques podrían ser capaces de someter a los rebeldes, pero no estaba
seguro, “y perder sus tanques significaba perder su poder”, dice Yates en el
documento.
Agrega que Wessin tenía buenas
razones para dudar de la lealtad dela Fuerza
Aérea en San Isidro, ya que las tropas del CEFA marchaban
hacia la ciudad capital y la fuerza se dividía, “podría tener que hacer frente
a fuerzas hostiles en el frente y en la retaguardia. Basado en estos cálculos,
le pareció más prudente pararse firme en San Isidro y dejar que se desarrollara
la situación”.
razones para dudar de la lealtad de
Aérea
hacia la ciudad capital y la fuerza se dividía, “podría tener que hacer frente
a fuerzas hostiles en el frente y en la retaguardia. Basado en estos cálculos,
le pareció más prudente pararse firme en San Isidro y dejar que se desarrollara
la situación”.
Este estado de cosas, junto a la
renuencia pública del jefe de Estado Mayor dela Fuerza Aérea , general de
brigada Juan de los Santos Céspedes, de combatir a los rebeldes, le dio a
Wessin la excusa que necesitaba para su falta de acción.
renuencia pública del jefe de Estado Mayor de
brigada Juan de los Santos Céspedes, de combatir a los rebeldes, le dio a
Wessin la excusa que necesitaba para su falta de acción.
“Denunció a la Fuerza Aérea por su falta de
apoyo y en una conversación con Reid el domingo en la mañana, le explicó que
los tanques de San Isidro no se podían enviar contra los rebeldes sin contar
con la protección aérea”, lo que demuestra, además, las desavenencias existentes
entre los diferentes mandos armados en la época dela Revolución.
apoyo y en una conversación con Reid el domingo en la mañana, le explicó que
los tanques de San Isidro no se podían enviar contra los rebeldes sin contar
con la protección aérea”, lo que demuestra, además, las desavenencias existentes
entre los diferentes mandos armados en la época de
Intervención no va, dice Washington
Al
comprender que Reid Cabral no podría contar con el apoyo de sus fuerzas
militares, William Connett, quien estaba a cargo dela Embajada , llamó a
Washington y conferenció con Kennedy M. Crocket, director del Departamento de
Estado para el Area del Caribe, sobre los diversos cursos de acción que los
Estados Unidos podrían tomar. Todavía es domingo 25.
comprender que Reid Cabral no podría contar con el apoyo de sus fuerzas
militares, William Connett, quien estaba a cargo de
Washington y conferenció con Kennedy M. Crocket, director del Departamento de
Estado para el Area del Caribe, sobre los diversos cursos de acción que los
Estados Unidos podrían tomar. Todavía es domingo 25.
“Ambos descartaron en ese momento la
posibilidad de una intervención norteamericana para salvar a Reid; acordaron,
en su lugar, que el mejor medio para evitar un derramamiento de sangre y evitar
la toma del poder por los comunistas era incitar a los jefes militares de ambos
lados a establecer una junta temporal que se comprometiera a llevar a cabo
elecciones en otoño”.
posibilidad de una intervención norteamericana para salvar a Reid; acordaron,
en su lugar, que el mejor medio para evitar un derramamiento de sangre y evitar
la toma del poder por los comunistas era incitar a los jefes militares de ambos
lados a establecer una junta temporal que se comprometiera a llevar a cabo
elecciones en otoño”.
Al discutir esta alternativa, Connett
y Crocket calcularon mal dos puntos, “ambos dieron por sentado el apoyo popular
al establecimiento de una junta y asumieron que los oficiales rebeldes estarían
anuentes a esta solución, ahora que la participación comunista había
contaminado el movimiento insurreccional”.
y Crocket calcularon mal dos puntos, “ambos dieron por sentado el apoyo popular
al establecimiento de una junta y asumieron que los oficiales rebeldes estarían
anuentes a esta solución, ahora que la participación comunista había
contaminado el movimiento insurreccional”.
A esto siguió el mensaje oficial del
Departamento de Estado instruyendo a Connett a estimular las negociaciones a
favor de una junta militar, aunque este documento no llegó a manos del jefe
asistente hasta después de su reunión de media mañana con Reid Cabral, en la
que éste último manifestó poco interés por la idea del establecimiento de una
junta.
Departamento de Estado instruyendo a Connett a estimular las negociaciones a
favor de una junta militar, aunque este documento no llegó a manos del jefe
asistente hasta después de su reunión de media mañana con Reid Cabral, en la
que éste último manifestó poco interés por la idea del establecimiento de una
junta.
El documento expresa en torno a este
punto, que “no es que las reservas que sintiera Reid importaran en ese momento,
pues los agregados militares norteamericanos ya estaban discutiendo la
formación de la junta militar con líderes militares dominicanos, haciendo así
menos posible que sus unidades salieran en defensa de Reid, tampoco Estados
Unidos lo haría, y así se lo informó Connett ‘al americano’, como llamaban a
Reid Cabral en el seno del pueblo”.
punto, que “no es que las reservas que sintiera Reid importaran en ese momento,
pues los agregados militares norteamericanos ya estaban discutiendo la
formación de la junta militar con líderes militares dominicanos, haciendo así
menos posible que sus unidades salieran en defensa de Reid, tampoco Estados
Unidos lo haría, y así se lo informó Connett ‘al americano’, como llamaban a
Reid Cabral en el seno del pueblo”.
Al comprender Reid Cabral lo
irremediable de su situación, se rindió ante lo inevitable. “Poco después de su
reunión con Connett, llamó ala
Embajada de los Estados Unidos y anunció su intención de renunciar
al poder a favor del establecimiento de la junta militar, para entonces, su
gesto fue en vano. En una hora, las tropas constitucionalistas bajo el mando
del coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, se tomaron el Palacio Nacional y
arrestaron a Reid Cabral. Todavía no se había formado la famosa junta a la que
según había dicho el triunviro, le entregaría el poder”.
irremediable de su situación, se rindió ante lo inevitable. “Poco después de su
reunión con Connett, llamó a
Embajada
al poder a favor del establecimiento de la junta militar, para entonces, su
gesto fue en vano. En una hora, las tropas constitucionalistas bajo el mando
del coronel Francisco Alberto Caamaño Deñó, se tomaron el Palacio Nacional y
arrestaron a Reid Cabral. Todavía no se había formado la famosa junta a la que
según había dicho el triunviro, le entregaría el poder”.
Quién y qué llenaría el vacío
político, era la preocupación de todos los partidos interesados, aunque
persistía la idea de la Junta, tal como fuera expresada por Estados Unidos,
idea que fue bien recibida por los oficiales militares llamados “leales”, que
no se habían sumado a la revuelta, “y los oficiales rebeldes indicaban que
estaban dispuestos a discutir el asunto”.
político, era la preocupación de todos los partidos interesados, aunque
persistía la idea de la Junta, tal como fuera expresada por Estados Unidos,
idea que fue bien recibida por los oficiales militares llamados “leales”, que
no se habían sumado a la revuelta, “y los oficiales rebeldes indicaban que
estaban dispuestos a discutir el asunto”.
“Pero a medida que avanzaba el día,
Connett empezó a perder las esperanzas en estas negociaciones, los rebeldes
estaban claramente a cargo de la situación y no tenían ningún motivo para
ceder, más aún, los informes dela
CIA indicaban que los jefes comunistas, cuya influencia en
las calles parecía aumentar por horas, nunca estarían de acuerdo con el
establecimiento de un gobierno militar”.
Connett empezó a perder las esperanzas en estas negociaciones, los rebeldes
estaban claramente a cargo de la situación y no tenían ningún motivo para
ceder, más aún, los informes de
CIA
las calles parecía aumentar por horas, nunca estarían de acuerdo con el
establecimiento de un gobierno militar”.
Yates manifiesta en su informe que
el vocero más expresivo entre los civiles y militares rebeldes –se refería a
José Francisco Peña Gómez–, declaró la intención de devolver el poder a Bosch
y al gobierno constitucional.
el vocero más expresivo entre los civiles y militares rebeldes –se refería a
José Francisco Peña Gómez–, declaró la intención de devolver el poder a Bosch
y al gobierno constitucional.
Los planes ya se estaban ejecutando
para traer al ex presidente del exilio en Puerto Rico, en tanto, el profesor
Bosch había autorizado a sus seguidores el establecimiento de un gobierno
provisional a cargo del “prominente político del PRD, José Rafael Molina
Ureña”. A partir de la toma de posesión de Molina Ureña, los acontecimientos se
desencadenaron, provocando la división entre los aliados, lo que será tratado
en otro capítulo.
para traer al ex presidente del exilio en Puerto Rico, en tanto, el profesor
Bosch había autorizado a sus seguidores el establecimiento de un gobierno
provisional a cargo del “prominente político del PRD, José Rafael Molina
Ureña”. A partir de la toma de posesión de Molina Ureña, los acontecimientos se
desencadenaron, provocando la división entre los aliados, lo que será tratado
en otro capítulo.
Martes, 22 de abril de
1997
1997
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